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martes, 10 de diciembre de 2013

CAPÍTULO 22: CLASIFICACIÓN

Tardé varios segundos en reaccionar por lo que Zayn comenzó a preocuparse.
-¿______? ¿Te encuentras bien?- preguntó Zayn tomando mi cara entre la cálida palma de sus manos. Asentí sin quitar la vista de la cama con dosel.
-¿Qué es esto, Zayn?- pregunté señalando la cama con el dedo índice.
Él me miro y sonrió con timidez.
-Bueno, creí que quizás tú querías… pues eso…- se rascó la nuca en busca de una respuesta que no sonase demasiado grosera pero no la encontró.
-¿Te refieres a sexo?- pregunté con el ceño fruncido- ¿Crees que solo estoy contigo por el sexo?
Mis manos pasaron a ser puños y mi mirada reflejaba la frustración que sentía en esos momentos. No me podía creer que Zayn pensase que estaba con el solo para tener relaciones sexuales.
-No me refería a eso…- murmuró Zayn cabizbajo.
-Si quisiera estar con alguien para tener sexo, te puedo asegurar que no te habría elegido a ti- dije con furia aunque segundos después me arrepentí de haberlo dicho. No era lo que quería decir.
-¿Qué quieres decir con que “No te habría elegido a ti?- preguntó con el ceño fruncido- ¿Acaso no me quieres?
Me masajeé las sienes intentando calmarme. Todo se estaba saliendo de lugar.
-Zayn, yo te quiero como a nada en este mundo pero…- hice una pausa para retener las lágrimas que amenazaban con asomar por mis ojos- no creo que pudiera jugar con tus sentimientos de una manera tan cruel.
Tras varios segundos de silencio entre nosotros, Zayn sonrió y me besó apasionadamente.
Sus manos pasaron de mi estómago a mi cuello. Agarré sus brazos con fuerza y me aferré a ellos como fuente de resistencia. Sus besos eran irresistiblemente apasionados y eso me hacía sentir una corriente de adrenalina recorriéndome la espalda.
-Te amo- susurró en mi oído. Me estremecí al notar su suave aliento en mi cuello y él pareció notarlo ya que se apartó de mí con un sabe desliz. Me observó durante unos pocos segundos y me cogió de la mano.
Me llevó  hasta la cama y allí se sentó él y me sentó en su regazo. Comenzó a acariciarme el pelo introduciendo sus delicadas manos en él. Me giró el rostro y me besó con tanta intensidad que caí de lado en el colchón.
Este comenzó a desabrocharme el vestido con movimientos ágiles pero antes de que pudiese terminar de hacerlo le aparté la mano con delicadeza elaborando mis próximas en mi mente.
-Zayn, no estoy preparada- susurré intentando que mis palabras no hiciesen eco entre los árboles.
 Él me miró confuso pero su expresión se suavizó al ver cómo me temblaban las manos.
-No te preocupes preciosa- dijo con una sonrisa cálida- si es eso lo que quieres lo respetaré. Se tumbó en la cama y palmeó con la mano el lado de la cama que estaba a su lado, pidiéndome que se tumbase a su lado.
Me recosté sobre su pecho y noté su respiración apresurada. Miré hacia arriba y contemplé aquella maravilla de escenario que tenía a la vista. Toda una constelación de estrellas se alzaba majestuosamente sobre nuestras cabezas, irradiando luz y belleza.
Solté un suspiro tras darme cuenta de todo lo que habría tenido que pasar Zayn para poder complacerme llevando aquella enorme cama al jardín. No era un simple jardín con árboles y flores de colores chillones, era el jardín donde conocí a Zayn, era nuestro jardín.
-Gracias- dije girándome sobre su pecho para poder mirarle a los ojos.
-¿Por qué?- preguntó levantando la cabeza para estar a la misma altura que yo.
-Por todas las cosas que has hecho por mí- susurré con un hilo de voz.
-Haría cualquier cosa por verte sonreír- antes de dejarme responder me besó en los labios rápidamente, por lo que no pude disfrutar del beso como me habría gustado pero notar sus labios sobre los míos era más de lo que jamás me habría podido imaginar.
Mis ojos se deslizaron a través de la oscuridad que se extendía a través de los árboles.
-Creo que debemos volver a la sala de entrenamiento- objetó Zayn incorporándose. Le miré y asentí seriamente. No tenía ganas de volver y enfrentarme a todas las miradas de curiosidad por parte de los cotillas que se interesaban más en las vidas ajenas que en sus propias vidas.
Me levanté de la cama y me alisé el vestido. Inspiré el suave aroma a rosas y agarré la mano de Zayn con fuerza. Nos sonreímos mutuamente y nos dirigimos a la sala de entrenamiento con paso moderado. Cuando llegamos Harry se encontraba subido en un gran atril de madera donde decía algo en voz alta.
Entramos en la sala intentando pasar desapercibidos  pero antes de pudiésemos encontrar un buen sitio donde sentarnos, todas las miradas se dirigieron a nosotros. Harry me lanzó una mirada fugaz y siguió leyendo en voz alta sin prestarme demasiada atención.
Desde el fondo de la sala ví como una mano se alzaba en el aire haciéndonos señales para que nos acercásemos y yo tiré de Zayn para dirigirle donde María nos señalaba con la mano.
-Hola ______- dijo en un susurro apenas aludible.
-Hola- dije observando a Harry con cautela.- ¿Dónde está Alexandra?- pregunté mirándo a mi alrededor. Detrás de mí se encontraba Daniela, observando a Harry con tal ensimismamiento que ni siquiera se percató de mi presencia.
-Está con Niall- bufó ella señalándome un punto de la habitación completamente oscuro. Distinguí dos figuras en la oscuridad pero no podía verlas con nitidez así que tuve con conformarme con saber que estaban en esa zona.
Asentí y presté atención a Harry el cuál le acababa de ceder el puesto en el pequeño escenario iluminado por un tenue foco de luz.
-Ha llegado el momento definitivo. El momento en el que el entrenamiento y todo lo que conlleva haberlo sobrellevado con éxito se celebren.- dijo Liam sosteniendo el micrófono con ambas manos- Haremos una clasificación con las personas de cada grupo que tengan más capacidad física para luchar y defenderse y los que queden entre los 10 primeros tendrán la oportunidad de escoger un lugar donde vivir alrededor del mundo.
Los murmullos inundaron la sala aumentando de intensidad por cada segundo que pasaba. Liam dio golpecitos con los dedos en el micrófono esperando a que los murmullos cesaran pero al ver que esto no ocurría gritó.
-¡Silencio!- el eco de su voz resonó en la habitación durante varios segundos hasta que el sonido de extinguió por completo. La cara de Liam estaba roja de la rabia y tardó varios segundos en volver a su color natural.
-Los que no hayan conseguido estar entre los 10 mejores de cada grupo podrán quedarse en el internado entrenando durante varios meses más o podrán graduarse en el servicio de espionaje que tenemos a nuestra disposición.
Contuve la respiración al oír aquello. ¿Qué pasaría si no conseguía estar entre los 10 mejores del equipo de entrenamiento? ¿Tendría que quedarme allí durante varios meses más sin ver a Zayn?
Sacudí la cabeza y pestañeé rápidamente alejando las lágrimas de mis ojos. No quería que eso ocurriera.
Proyectaremos en esta pantalla la clasificación final por lo que sabréis cuál ha sido el puesto que habéis obtenido.

1.       Austin.
2.       Niall.
3.       Stephen.
4.       _______
5.       Daniela.
6.       María.
7.       Joe.
8.       Alexandra.
9.       Ashton.
10.   Tania.

Oí gritos de alegría y lamentos por parte de la multitud que saltaba y gritaba alegrada. Intenté moverme pero mis articulaciones no respondían. Revisé la clasificación en busca del nombre de Zayn pero no apareció por ningún lado.
“No ha conseguido clasificarse” me lamente en mi foro interior. Dejé que las lágrimas fluyesen por mis ojos y se resbalasen por mis mejillas humedeciéndolas. No podía dejar que Zayn se alejase de mí pero no había otra cosa que estuviese en mi mano.
-_____, cielo- susurró Zayn en mi oído en un intento por felicitarme aunque pude notar la amargura en su voz- Felicidades.
Le miré a los ojos y me sequé las lágrimas con fiereza.
-¿Por qué… no has podido clasificarte?- pregunté luchando contra las lágrimas que se desbordaban contra mis ojos.
-No lo sé, preciosa- me respondió juntando sus labios con los míos en un intento por calmarme. En ese momento, en ese preciso instante fue cuando me di cuenta de la razón por la que Zayn no se había clasificado.
Había perdido dos combates y para que una persona consiguiese clasificarse solo podría haber perdido un combate. Uno de los combates que Zayn perdió fue contra Austin, el cuál casi lo mata a golpes y el otro… el otro combate fue contra mí.
El hecho de que me dejase ganar simplemente porque no quería hacerme daño había supuesto que no pudiera clasificarse. Todo había sido por mi culpa.
-No- susurré horrorizada. Me levanté de golpe y corrí hacía la salida en busca de alguien que pudiese arreglar aquel malentendido. Zayn no se merecía aquello simplemente por haberme dejado ganar en un combate en el que era él el que tenía que haber resultado ganador.
Grité y caí al suelo presa del pánico. No podía ni quería soportar estar sin Zayn sabiendo que nuestra separación había sido por mi culpa, aunque solo fuesen unos meses, no lo soportaría.
Necesitaba decírselo a alguien para que solucionase aquel problema y la solución apareció delante de mis ojos.
Liam salió de la sala de entrenamiento por una de las puertas laterales y anduvo rápidamente por el largo pasillo hasta que giró en sentido opuesto. Me levanté del suelo y corrí detrás de él.
Intenté que al correr, los tacones que llevaban no hiciesen mucho ruido pero al ver que mi plan no funcionaba opté por quitármelos y dejarlos en medio del pasillo. Seguí corriedo para alcanzar a Liam pero cuando llegué a la esquina oí voces provenientes de una de las habitaciones que conectaban con la pared en la que estaba apoyada.
-Liam ¿Qué haces aquí?- oí que le preguntaba una voz grave y autoritaria. Dí un respingo cuando me di cuenta de que esa voz era exactamente la misma que había oído en el pasillo hacía varias semanas cuando estaba en el baño de la habitación.
-¿Por qué lo has hecho?- preguntó él con fiereza.
-No sé de qué me estás hablando.
-¿Por qué has amañado la clasificación?- preguntó con sequedad. Me tapé la boca con la mano en un intento por ahogar una exclamación.
-¿Yo? Yo no echo absolutamente nada- se excusó el chico saliendo de la habitación. Me pegué contra la pared y contuve el aliento, rezando por que no pasase por el pasillo en el que yo me encontraba.
-Daniel, me lo han contado todo- dijo Liam.
-¿A si? ¿Quién?- la voz de Daniel sonó áspera y dura, como si le temiese a algo.
-Eric- murmuró Liam entre dientes.
-¿Lo dices por haber dejado fuera de la clasificación a ese tal Zayn Malik?- preguntó Daniel con tono burlón. Noté la apresurada respiración de Liam y los músculos del cuello se me tensaron.
-Si, me refiero a eso.
-Bien te diré la verdad- espetó Daniel- es demasiado valioso como para dejarlo vivir en cualquier lugar del mundo. Sus capacidades físicas y mentales son demasiado elevadas como para dejarle ir así como así.
Al oír aquello retrocedí de forma automática dando pasos lentos pero precisos.
Entonces alguien me agarró por detrás.
Comencé a gritar, pero una mano áspera me tapó la boca impidiéndome gritar. Me revolví pero los brazos que me sujetaban no mostraban debilidad alguna. Eran demasiado fuertes como para luchar contra ellos.
¿Qué pasaría ahora?
 

2 comentarios:

  1. Que demonios ha ocurrido?? Que hacen con rayis??? D: no!! Siguela pronto!!!!

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  2. Vas Happenin!!!
    Lamento no haber comentado pero se rompió mi cargador y me acaba de llegar el repuesto...
    Quien atrapo a Rashita?
    Síguela

    Alex!!! :3

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