CAPÍTULO 32: PRIMERA VEZ
NARRAS TÚ:
Nos tumbamos boca arriba, muy juntos, tapados con el edredón.
Segundos después alargué la mano hasta su camisa y poco a poco la fui desabrochandola
hasta que su torso se quedó completamente desnudo.
Este hizo lo mismo con mi vestido, el cual lo lanzó a algún
lugar oscuro de la habitación.
Comencé a sentir el frio traspasándome la piel, y cuando
Niall lo notó, me abrazó fuertemente transmitiéndome su calor.
Me besó apasionadamente mientras me desabrochaba el sujetador
y hacía con él lo mismo que había hecho con el vestido, el cual yacía en el
suelo, arrugado.
Se quitó los pantalones en un gesto rápido y comenzó a
desnudarme por completo cuando yo grité:
-¡Basta!- mi pecho se contraía rápidamente mientras varias
gotas de sudor surcaban de mi frente.
-¿Estás bien?- preguntó Niall incorporándose. Me miraba
preocupado, como si lo que fue a hacer estuviese prohibido.
-Es que… tengo miedo- dije temblando. Niall me miraba
incrédulo mientras intentaba no echarse a reír.
-¿Nunca lo has hecho?- preguntó mirándome con deseo. Negué
con la cabeza avergonzada por admitir algo tan íntimo con aquello.
-Me enorgullece saber que voy a ser el primero en hacerte
mía- susurró en mi oído dejándome completamente desnuda.
En un delicado movimiento me penetró, a lo que yo solté un
pequeño grito de dolor, provocando que Niall me mirase preocupado.
-¿Quieres que pare?- preguntó con expresión asustada.
Volví a negar con la cabeza, a lo que Niall comenzó a
moverse dentro de mí con suaves movimientos.
Los siguientes minutos fueron puro placer para mí, al
contrario de lo que me había imaginado. El proceso fue lento, paciente,
silencioso y no especialmente doloroso.
Solté varios gemidos de placer al llegar al orgasmo, y
segundos después, me recosté en el pecho de Niall, con la frente empapada de
sudor.
Estaba agotada, sin embargo Niall no parecía estarlo ya que
comenzó a depositar pequeños dulces besos en mi cuerpo, lo que me excitó más
aún.
Comencé a reír descontroladamente mientras Niall me hacía
cosquillas por todo el cuerpo. Mis carcajadas traspasaban la pared de la
habitación, por lo que decidí bajar el volumen de mis gritos desquiciados.
-Para por favor- supliqué riendo a carcajadas. Niall cesó
sus cosquillas pero se acercó a mi oído y susurró:
-Te amo- esas palabras causaron un gran revuelo en mi
interior ya que de un momento a otro me encontré entre la espada y la pared.
Horas tras, Brad me había confesado que me amaba y yo ni
siquiera le había respondido. No respondí
al alago de Niall hasta que este fijó sus ojos celestes en mi, esperando
a que respondiese.
-Yo también te amo- respondí dulcemente. Pasé la mano por
sus tonificados bíceps y un escalofrío recorrió mi cuerpo.
Mis ojos se fueron cerrando lentamente, hasta que me quedé
profundamente dormida sobre el torso desnudo del hombre al que amaba.
……
Unos extraños movimientos captaron mi atención,
despertándome por completo. Alcé la vista y contemplé la figura de Niall saliendo
del baño. Llevaba una toalla que le tapaban sus partes más íntimas. Parecía
ocupado buscando algo por la habitación, sin éxito alguno.
Me dediqué a contemplarle asegurándome de que las sábanas me
tapan el cuerpo. Le miraba con el deseo de que regresase a la cama y me besase
como parte de darme los “Buenos días”.
Niall me miró y una sonrisa pícara se escapó de sus labios
hinchados por el calor que se filtraba por los cristales de las ventanas
abiertas de par en par.
-Buenos días princesa- dijo metiéndose entre las sábanas
para a continuación darme un dulce beso.
-Buenos días- respondí ocultando mi cara en su torso, aún húmedo
por la reciente ducha que se había dado.
-¿Cómo has dormido?- preguntó levantando una ceja. En su
mirada pude notar cierto tono descarado, burlándose por lo de anoche. Analicé
la pregunta y llegué a la conclusión de que se estaba burlando de mí por haber
sido virgen hasta hacía varias horas.
-Estúpido- murmuré levantándome de la cama para dirigirme al
baño y darme una ducha.
-Espera, _______(tn)- dijo Niall agarrándome del brazo, impidiendo
que entrase al baño- lo siento, siento haber sido tan… poco hombre- dijo con
una sonrisa inocente que hizo que se me ablandase el corazón.
-Mamarracho- escupí las palabras pero al ver su expresión
divertida sonreí y le abracé rodeando su cintura con mis delgados brazos.
-Te amo- susurró por decimosexta vez, enterrando la cabeza
en mi pelo. Lo había oído tantas veces decir aquellas palabras, pero apenas me
lo demostraba.
-Demuéstramelo- dije persuasivamente mientras le miraba
esperando alguna respuesta convincente por su parte. Niall me miraba extrañado
como si no supiese qué responder.
-¿Cómo quieres que lo haga?- preguntó con el entrecejo
fruncido.
-Demuéstraselo al mundo- Niall me moraba sorprendido por mis
palabras, aunque a decir verdad, ni yo misma me esperaba ser tan sincera-
demuéstrale que nos queremos y que nada ni nadie puede controlarnos.
Me sentía inútil por decir aquellas palabras pero no poder
hacer nada al respecto.
-Vamos a hablar con Anna para que nos permita estar juntos
de cara al público- supliqué con una llama de esperanza vibrando en mi
interior.
Niall me miraba poco convencido y tras unos segundos de
reflexión dijo:
-______(tn), no sé si te habrás olvidado pero estoy
comprometido- dijo bajando la mirada- lo siento, pero no puedo aceptar tu
propuesta.
Mis ojos se llenaron de lágrimas al oír esas palabras y la
poca fuerza y esperanza de luchar contra el amor del chico al que amaba, se
desvanecieron junto con todos aquellos sentimientos de venganza y superación,
hacía todos aquellos que nos controlaban.
Las lágrimas surcaron mi rostro, empapándolo y sumergiéndole
en un baño que solo sirvió para que Niall sintiese lástima de mi, algo que
odiaba profundamente de alguien.
-Bien, si eso es lo que quieres, cásate con Lucía y espero
que seas muy feliz a su lado- entré en el bañó y cerré la puerta en sus
narices.
Esperé a que se marchase de la habitación pero al ver que no
lo hacía, lancé un jarrón hacía el espejo que adornaba uno de los estantes
colocados en la pared, haciéndolo añicos.
Grité de rabia por tener que soportar todo aquello. Niall me
había utilizado simplemente para tener sexo y eso era algo que nunca podría
perdonarle.
Me resbalé en la puerta hasta que quedé completamente
sentada, mientras sollozaba desconsoladamente deseando despertar de aquella
pesadilla en la que me había adentrado.
“Todo había comenzado como un sueño, y terminó como una
pesadilla”
P.D. Hola!
Bueno, os quería avisar de que estaré una semana o quizás
más tiempo sin subir cap ya que me voy de vacaciones y no podré escribir porque
en lugar al que voy no hay Internet *______*
En cuanto vuelva colgaré algún capítulo (Espero que me dé tiempo) y será más largo.
Espero que os haya gustado el cap y ¡¡¡COMENTAD!!!
Besos xx